El alineamiento de las llantas se refiere al ajuste preciso de los ángulos de las ruedas de tu vehículo para que estén paralelas entre sí y perpendiculares al suelo. Este proceso es esencial para garantizar un manejo seguro y un desgaste uniforme de los neumáticos.

Los tres ángulos principales que se ajustan durante el alineamiento son:

1. Cáster: Es el ángulo de inclinación hacia adelante o hacia atrás de la línea vertical de la rueda cuando se ve desde el costado del vehículo. Un cáster adecuado contribuye a la estabilidad direccional.
2. Camber: Es el ángulo de inclinación de la llanta hacia adentro o hacia afuera cuando se ve desde el frente del vehículo. Un camber correcto ayuda a que la llanta tenga un desgaste uniforme y contribuye a la estabilidad en línea recta.
3. Toe: Es la medida de la diferencia de distancia entre los neumáticos delanteros y traseros de un mismo eje. Un ajuste adecuado del toe asegura que las ruedas estén paralelas entre sí. Un toe incorrecto puede causar desgaste irregular de los neumáticos y afectar la estabilidad del vehículo.